
¿Cómo está siendo mi adaptación a esta ciudad? Mi Erasmus+ en Cracovia
Estos primeros meses que he pasado aquí me han permitido acostumbrarme a la vida en Cracovia. En mi primer artículo de mi erasmus+ en Cracovia ya os conté mi primera impresión de la ciudad.
Creo que puedo decir que el ritmo es casi igual que en Burdeos; es muy agradable vivir aquí y nunca tienes sensación de aburrimiento, siempre hay algo que hacer o ver. Es una ciudad en la que me siento segura, con libertad y con una gran variedad de paisajes y naturaleza bien conservada.
Debido a la situación actual, hago mi trabajo desde casa; así que siempre estoy ocupada con algo… pero cuando salgo siempre es fácil conocer gente, aún con la dificultad del idioma. Los polacos son muy acogedores, siempre invitan a salir con ellos, aunque es verdad que al principio puedan parecer un poco fríos.
Además, puedo encontrar fácilmente los alimentos a la que estoy acostumbrada a comer en general, y en cuanto a la gastronomía nunca me han decepcionado las especialidades polacas que he tenido la oportunidad de probar. Es verdad que Cracovia tiene una gran variedad de restaurantes de todo tipo y he podido tomarme algún capricho para pedir en un restaurante típico francés como el «Petite France»
En cuanto a la climatología, en pocas semanas la temperatura ha mejorado mucho, la primavera ha llegado por fin y el clima está siendo más agradable. Estamos lejos de los -18°C de principios de enero y las horas de luz van haciendo su presencia y cada vez me alegro más de elegir Cracovia como destino de Erasmus+
¿Qué lugares me están sorprendiendo más?
Incluso después de más de tres meses aquí, nunca me cansaré de pasear por el casco antiguo, más concretamente por la Plaza del Mercado. De todas formas, como dije en mi anterior artículo, casi todos los caminos llevan a ella. En la plaza se encuentra la Basílica de Santa María, una de las más bellas e impresionantes que jamás haya visitado. A menudo, basta con mirar hacia arriba y admirar las paredes y los techos pintados de diferentes colores: azul, dorado, rojo. Una auténtica experiencia en cuanto a explosión de colores que la mayoría de las iglesias góticas europeas han perdido.
Aunque suelo ir andando a los lugares que quiero visitar, gracias al transporte público puedes alejarte fácilmente del centro, lo que me permitió visitar por ejemplo el barrio de Nowa Huta. En este distrito tienes la impresión de haber dejado Cracovia y estar en una ciudad totalmente diferente…. El lugar más importante es la plaza central (Plac Centralny). De su centro parten cinco grandes avenidas que forman una estrella. Junto a esta enorme rotonda encontrarás carteles que describen la zona y sus puntos de interés, permitiéndote disfrutar de la arquitectura típica del socialismo real del barrio.



¿Qué museos e iglesias he conocido?
Durante todo este tiempo he tenido la oportunidad de visitar varios edificios, en particular museos, como por ejemplo el Museo Subterráneo. Éste se encuentra bajo la Plaza del Mercado, en concreto bajo la Lonja de Paños. En esta fantástica exposición, uno sale de allí con la certeza de conocer aún más de la historia antigua y aquella menos conocida de Cracovia. Sorprende ver la tecnología del siglo XXI cómo facilita adentrarse en un museo que destacaría por su faceta de interactividad. Este hecho permite al visitante descubrir esa ciudad vetusta de una manera divertida.
Las maquetas, planos y reconstrucciones presentes, permiten imaginar la ciudad con vídeos, sonidos y juegos de luces. Además, todas las explicaciones e interacciones están en varios idiomas.
O si andamos unos pocos pasos, tomando la calle Florianska, dentro de la ruta real, hallaremos la Casa de Jan Matejko (Dom Jana Matejki), situada en uno de los lugares privilegiados del centro histórico de Cracovia. Este museo fue el hogar de uno de los artistas polacos más importante del siglo XIX, Jan Matejko. Tras su fallecimiento, la casa se convirtió en el primer museo biográfico de Polonia. Hoy en día da bienvenida a quienes deseen conocer su obra e historia familiar.
En lo que se refiere a la temática de arquitectura religiosa, deseo contarte aquí algunas de las iglesias que me han parecido más bellas, recordando que la Basílica de Santa María es de obligada parada. Empecemos por la Iglesia de los Franciscanos; me quedo con el hecho de que está bellamente decorada con motivos florales y numerosas e impresionantes vidrieras de Wyspianski. Cuando hace sol, se puede disfrutar de los colores, las formas y los patrones orgánicos presentes en el edificio.
Otra iglesia al este del casco antiguo, en el barrio de Wesola, allí se encuentra un templo que toma por nombre Sagrado Corazón de Jesús. Es poco conocida y, sin embargo, es una de las iglesias modernistas (conocidas como «arte nuevo») más interesantes de Cracovia. El arquitecto Franciszek Mączyński construyó el edificio en 1921. Destaca por la riqueza de su interior, por sus mosaicos y esculturas en particular. La torre de la iglesia de ladrillo rojo es una de las más altas de Cracovia, con una altura que alcanza los 68 metros.
Fuera de la plena ciudad, ¿algo que visitar? Mi Erasmus+ en Cracovia
Es interesante poder alejarse un poquito de la ciudad e ir a un lugar más tranquilo, poco visitado por los turistas, para poder pasear. La ciudad de Cracovia tiene la particularidad de estar rodeada por varios kopiec (montículos).
De entre todas esas colinas artificiales, una de las más antiguas es la llamada Krakus, sin dejarnos atrás otro más alejado en el barrio de Nowa Huta llamado Wanda.
El Kopiec Kosciuszki es el más popular, donde por cierto, en estos días que se han celebrado las jornadas de la bandera y la Constitución polaca se ha desplegado una enorme bandera de Polonia .
El Kopiec Pilsudskiego es el más grande y desde su cima permite ver incluso parte del aeropuerto. Y en lado opuesto en cuanto a dimensión, el Kopiec Jana Pawla II, éste el más pequeño, dedicado al Papa Juan Pablo II.
Todos ellos en definitiva te permiten abandonar por unas horas la ciudad y sacar provecho de las hermosas vistas y paisajes. Es interesante para los aficionados a la fotografía y para los que quieran hacer una excursión mientras disfrutan de la naturaleza.
Si quieres saber más de mi experiencia Erasmus + en Cracovia, si has viajado a esta ciudad o te gustaría conocerla puedes enviarme un comentario. ¡Hasta pronto!